NO FUE UN DEBATE, PERO NO IMPORTA

Los precandidatos al final del conversatorio.

No puedo evitar las comparaciones. Mariano Rajoy del Partido Popular (PP) y Alfredo Rubalcaba del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) tuvieron un debate, que si bien fue respetuoso, no dejo de ser duro, con un Rajoy que no dejaba de señalar los fracasos del actual gobierno español y un Rubalcaba, tratando que Rajoy confesara su intención de revocar el estado de bienestar apenas llegado al gobierno. En las campañas electorales se combina tanto la campaña positiva (mostrar las virtudes propias para obtener el voto), como la campaña negativa (demostrar las falencias del otro para evitar el voto al contrario), esto no tiene que ver con campaña sucia (crear una imagen distorsionada del adversario a través del uso de la mentira) y eso fue lo que intentaron los candidatos españoles, quizás con más énfasis en lo negativo que en lo positivo.

Regreso a Venezuela, donde los precandidatos inscritos en la Confederación de partidos conocida como la Mesa de la Unidad Democrática, tuvieron igual un evento al que llamaron debate, aunque muchos dudan que esto finalmente sea lo que haya sido. Leamos la definición que Wikipedia hace del concepto: “Un debate es un acto de comunicación, que consiste en la discusión de opiniones contrapuestas sobre un tema entre dos o más personas.” La definición del Drae es mucho más escueta: Controversia o contienda, lucha o combate. Se entiende que por tanto que para que exista un debate, alguien tiene que estar en desacuerdo y básicamente eso no fue lo que se sintió en ese “acto”.

La obsesión por la unidad en las fuerzas opositoras, que se entiende porque en las actuales circunstancias posee características existenciales para la opción democrática del país, llevó a que cada candidato presentara sus propuestas, sin tratar de enfrentar las ideas de los contrarios. La ausencia de temas conflictivos, le quitó algo de entusiasmo al debate que pareció más un juego amistoso, donde está claro que no pueden salir jugadores lesionados que pueden hacer falta para cuando comience el campeonato de verdad, por allá el 13 de febrero.

El formato, que hay que reconocer como justo y equilibrado, obligaba a responder las preguntas en un minuto, en ese lapso se pueden decir muchas cosas, pero también se dejan de decir otras tantas. Así Los candidatos los aprovecharon hablando del que y muchas veces del porqué, pero se dejó muchas dudas en el como. Sobre los temas, los candidatos hicieron variaciones en torno a propuestas, similares o complementarias, es decir volvemos a lo mismo, nada que implicara un debate o confrontación de ideas.

Quien ganó el debate, se sabrá en los próximos días cuando aparezcan las encuestas y las opiniones de los encuestados sobre el particular. En nuestro análisis, los partidarios pueden sentirse satisfechos porque ninguno decepcionó. Pero solamente dos intentaron diferenciarse, Maria Corina Machado y su propuesta de capitalismo popular y la relación entre bienestar y desarrollo empresarial y Diego Arria, quien apuntando directamente a los responsables de la actual situación venezolana propuso una Asamblea Constituyente, con un mandato de tres años y demandar al Presidente en la Corte Penal Internacional por crímenes de lesa humanidad. Con eso se ganó el aplauso de la oposición radical, que con vista a las primarias, no dejan de ser un factor electoral importante.

La nota discordante: Intente ser objetivo, pero no puedo dejar pasar la alusión de Pablo Pérez de aspirar a ser el gran padre de familia de toda Venezuela. después de toda una historia de paternalismo y especialmente con 12 años de paternalismo extremo, lo menos que pido es un papá. Creo que ya somos un país adulto.

5 comentarios en “NO FUE UN DEBATE, PERO NO IMPORTA

  1. laura solsona

    De todos ellos, el señor Diego Arria, dijo cosas interesantes que yo quería escuchar y saber que algún día pudieran ser realidad. Me gustó su intervención (aunque no es mi candidato preferido) y particularmente creo que subirá varios puntos en las encuestas.

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  2. laura solsona

    Definitivamente no fue un debate, para mi fue la primera presentación de cada uno de ellos demostrando la UNIDAD. Los debates llegarán luego, aunque cada uno tenga aspiraciones deben saber muy bien que mucho van a sacrificar a lo largo del camino, pero es un ejemplo a seguir la forma tan civilizada como lo hicieron.

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  3. José Pérez Leal

    Coincido igualmente en que no pudo ser un debate, ni mucho menos una confrontación de ideas si todos juegan en un mismo equipo. Cuando mucho fue una práctica para ganarse el puesto en la selección. Hubiera sido interesante que además del público asistente hubieran asistido personas opuestas a las ideas de la MUD y también les hicieran preguntas pro gobierno, esto lo digo porque fue televisado y si además de querer convencer a los ya convencido, convencer a los de la cera del al frente.

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